En la medida de sus posibilidades, la Comunidad acoge a los padres con sus hijos (entre 6 y 12 años) durante las vacaciones escolares. Con la cercanía de la naturaleza, la vida conjunta, el compartir, los juegos, la participación en algunas liturgias y en las vigilias del retiro, ellos aprenden a descubrir y a expresar su propio descubrimiento de Dios.
Una acogida de familias acompañadas por los más “pequeños” (entre 1 y 5años ½) está propuesta durante un retiro de verano. Unas amigas de la comunidad asumen esta acogida para permitir a los padres participar plenamente del retiro.
Para los jóvenes (entre 14 y 17 años) que ya hayan participado en grupos de “Niños”, la Comunidad propone una etapa de transición antes de poder vivir un retiro. Participan en la eucaristía, comparten el trabajo comunitario -ya sea en comunidad, o en la acogida de los más pequeños- y viven espacios de intercambio en la amistad, acompañados de los adultos (comunitarios o amigos).
Los grupos “Jóvenes” y “Niños” forman parte de la vida de los retiros.
Para cualquier precisión contactar con el secretariado.